Mago de Oz - La Cantata Del Diablo (el Dios de Los Tristes)

 

La Cantata del Diablo (El Dios de los Tristes)

El Salmo de los Desheredados

Padre Nuestro, de todos nosotros,
de los pobres, de los sin techo,
de los marginados y de los desprotegidos,
de los desheredados
y de los dueños de la miseria,
de los que te siguen
y de los que en ti ya no creemos.

Baja de los cielos,
pues aquí está el infierno.
Baja de tu trono,
pues aquí hay guerras, hambre, injusticias.
No hace falta que seas uno y trino,
con uno sólo que tenga ganas de ayudar, nos bastaría.
¿Cual es tu reino?¿El Vaticano?
¿La banca?¿La alta política?
Nuestro reino es Nigeria, Etiopía, Colombia, Hiroshima.
El pan nuestro de cada día
son las violaciones, la violencia de género,
la pederastia, las dictaduras,
el cambio climático.

En la tentación caigo a diario,
no hay mañana en la que no esté tentado de crear a un Dios humilde,
a un Dios justo.
Un Dios que esté en la tierra,
en los valles, los ríos,
un Dios que viva en la lluvia,
que viaje a través del viento
y acaricie nuestra Alma.
Un Dios de los tristes, de los homosexuales. Un Dios más humano...
Un Dios que no castigue, que enseñe.
Un Dios que no amenace, que proteja.

Que si me caigo, me levante,
que si me pierdo, me tienda su mano.
Un Dios que si yerro no me culpe
y que si dudo me entienda.
Pues para eso me dotó de inteligencia,
para dudar de todo.

Padre Nuestro, de todos nosotros,
¿por qué nos has olvidado?
Padre Nuestro, ciego, sordo y desocupado,
¿por qué nos has abandonado?

La Cantata Del Diablo (el Dios de Los Tristes)

O salmo dos desesperados

Pai nosso, de todos nós
Dos pobres, e dos sem teto
Dos marginados e dos desprotegidos
Dos desamparados
E dos donos da miséria
Dos que te seguem
E dos que em ti já não crêem mais.

Desce dos Céus,
Pois aqui está o inferno.
Desce do teu trono,
Pois aqui há guerras, fome e injustiças.
Não há falta que sejas uno e trino,
Com um apenas (sozinho) que tenha vontade ajudar, nos bastaria.
Qual é o teu Reino? O Vaticano?
A banca? A alta política?
Nosso Reino é Nigéria, Etiópia, Colômbia, Hiroshima.
O pão nosso de cada dia
São as violações, a violência de gênero,
A pederastia, as ditaduras,
A mudança climática.

Na tentação caio a habitual
Não há manhã em qual não esteja tentado de criar a um Deus humilde,
A um Deus justo.
Um Deus que está na terra,
Nos vales, nos rios,
Um Deus que vive na chuva,
Que viaje através do vento
E acaricie nossa Alma.
Um deus dos tristes, dos homossexuais. Um Deus mais humano...
Um Deus que não castigue que ensine.
Um Deus que não ameace que proteja.

Que se eu caio me levante.
Que se eu me perco me estenda sua mão.
Um Deus que se erro não me culpe
E que se duvido que me entenda.
Pois para isso me dotou de inteligência,
Para duvidar de tudo

Pai nosso, de todos nós,
Por que nos esqueceu?
Pai nosso, cego, surdo e vazio,
Por que nos abandonou?